POLVOS MÁGICOS PARA EL AMOR
Un molcajete, pequeño
Agua minera!, la necesaria
Un vaso; una pizca de sal de grano
Dos varas de incienso, las que usted prefiera
Veintiocho gramos de semillas de puerro, se obtiene en donde venden productos de jardinería
Veintiocho gramos de pétalos de rosas rojas, secos
Veintiocho gramos de semilla de cilantro, cómprelos en el mismo sitio donde adquirió las de puerro
Una cajita de plata
En el vaso añada un poco de agua mineral y una pizca de sal con este líquido rocíe el molcajete el cual pasará sobre el humo que despida la varita de incienso, repita la operación hasta que la paja se consuma. Con el dedo índice de la mano derecha marque sobre el molcajete tres cruces. Una vez limpio el objeto haga lo mismo con la mano del molcajete. Espere a que sequen; muela las semillas y los pétalos, en tanto realiza la operación piense con amor en la persona a quien le recetará los polvos, éstos deben quedar pulverizados.
¿Listo? ahora, guárdelos dentro de una cajita de plata o de un pastillero, cárguelos con usted y en la primera oportunidad que se le presente agregue una pizca de estos polvos en la comida de quien le interese conquistar. Esta antigua fórmula es una de las más poderosas, era utilizada por cientos de hombres y mujeres en Inglaterra, Francia, Italia, entre otros países. Como es sabido los hechizos que se ingieren son los más eficaces y éste en especial se aconseja elaborarlo el primer día de luna nueva ¡Felices resultados!